Prevención del delito en México: ¿Cómo se implementa? Una evaluación de acciones financiadas por el Pronapred en Nezahualcóyotl

Fecha de publicación: mayo 2017

Autores: María Eugenia Suárez de Garay, Alejandro Agudo Sanchíz, Antia Fabiola Mendoza Bautista y Alan López Fabián.

Luego de tres años de la implementación del Programa Nacional para la Prevención Social de la Violencia (PNPSVD) en los ámbitos estatal y municipal, diversas preguntas demandan respuestas precisas para poder fortalecer y consolidar esta política: ¿qué retos enfrentan los gobiernos estatales y municipales para la ejecución exitosa de las acciones preventivas delineadas desde el PNPSVD y con qué fortalezas cuentan? ¿Qué resultados inmediatos perciben los beneficiarios directos a partir de su participación en las diversas acciones preventivas que se llevaron a cabo entre 2013 y 2016? Éstas fueron las preguntas guía de la serie de investigaciones Prevención del Delito en México: ¿Cómo se implementa?

El documento presenta una evaluación cualitativa de un conjunto de acciones implementadas en el municipio de Nezahualcóyotl y financiadas por el subsidio denominado Programa Nacional de Prevención del Delito (Pronapred)- Se concentró en recoger las experiencias y el punto de vista de diferentes actores involucrados en estas acciones: funcionarios a nivel estatal y municipal que fueron clave para los procesos de implementación; operadores de estas acciones –asociaciones civiles, consultores–, y su personal en terreno; beneficiarios directos – integrantes de las poblaciones definidas como prioritarias por el Programa Nacional para la Prevención Social de la Violencia (PNPSVD)–; y miembros de las comunidades donde han tenido lugar las mismas. Esta evaluación también se basó en la observación in situ y la revisión minuciosa de la documentación relativa al proceso de implementación de las acciones que se llevaban a cabo en el municipio de Nezahualcóyotl a finales de 2016 y principios de 2017, lo que permitió una comprensión más fina no sólo de las mismas acciones y sus alcances, sino de los múltiples desafíos que debemos atender si queremos fortalecer la joven política de prevención en México y posibilitar su consolidación.

Algunos de los principales hallazgos de esta evaluación fueron:

  • Se requiere consolidar los proyectos municipales de prevención en torno a una política integral que atienda los problemas específicos de violencia y delincuencia presentes en el municipio de Nezahualcóyotl.
  • El proceso administrativo representa un obstáculo central para la gestión e implementación de las acciones de prevención social en el municipio de Nezahualcóyotl.
  • Las débiles capacidades institucionales en los ámbitos municipal y estatal, así como el fuerte control que ejerce la Dirección General de Seguridad Ciudadana de Nezahualcóyotl sobre la gestión de las acciones preventivas dificultan los procesos de ejecución y coordinación de la política.
  • Los diagnósticos definidos por la Subsecretaría de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Gobernación a partir de nueve factores de riesgo asociados a la violencia y la delincuencia no explicitan por qué son generalizables para todas las realidades de un país con condiciones y necesidades plurales y tampoco han contribuido a obtener evidencia más compleja y directamente asociada con las realidades locales.
  • La ausencia de esquemas homologados para producir información de calidad sobre la implementación de las acciones Pronapred dificulta conocer sus posibilidades de incidencia.
  • La falta de criterios para la selección de la población objetivo limita la efectividad de las acciones preventivas.
  • Uno de los logros de la administración vigente en Nezahualcóyotl es la conformación de un nuevo estilo de gerencia de la policia para empoderarla, mediante un proceso de proximidad y legitimación con las comunidades vecinales.
  • La incipiente participación de la ciudadanía en la formulación, implementación y evaluación de las acciones preventivas limita los efectos que tienen sobre su población objetivo.

El estudio concluye con recomendaciones para mejorar los programas de prevención de la violencia.